Para vivir aquí
en este
desmemoriado país
donde se admite y se consiente
que del gobierno el propio presidente
defraude, engañe y mienta
persevere en la afrenta
y al cabo nada pase
que la verdad fracase
si a la justicia pide amparo
para vivir aquí
(eso lo tengo claro)
hay que echarle coraje.
Coraje para resistir
y firmeza para aguantar
para no dejarse arrastrar
por la mediocridad ambiente.
Si aquí quieres vivir
en este pintoresco, ineficiente
país de nombre oscuro
donde han clausurado
por decreto el futuro
y el presente de un sorbo se lo bebió el
pasado
hay que echarle a conciencia
mucha, muchísima paciencia
Paciencia hay que tener bastante
para componer el semblante
y no sentirse abochornado
con el turbio pasado
que no nos deja en paz
ni a sol ni a sombra
A ver quién es capaz
-dice el juglar invocando a la historia-
de levantar la alfombra
de rescatar de la memoria
y salvar del olvido
lo que pasó y no ha sido.
Y hay que tener algo más que paciencia
con la impagable herencia
que nos legó el franquismo:
demócratas fingidos, ineptos de carrera
fachas diversos, cínicos, mendaces que lo
mismo
te birlan la cartera
(véase aparte: salarios, pensiones
becas, copago, educación
tasas, reforma laboral...)
que se burlan del personal
vaciando por decreto las sesiones
del Parlamento y la Constitución.
Para vivir aquí
en este destartalado país
que ensaya una despedida
ahora que la crisis aprieta y hace daño
¿no sería mejor buscar una salida?
No se trata de olvidar y tejer un apaño
fraguar un acuerdo es preciso
y lograr de todos el compromiso
Hay que echarle coraje y firmeza y
paciencia
no olvidar de estos años la experiencia
y tomarse el asunto en serio:
hay que ayudar a que nazca lo nuevo.
rarodeluna
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