sábado, 13 de abril de 2013

Poética / Pasternak


Ya no reconocemos la realidad. Se nos aparece bajo una forma nueva, y esta forma, cualidad que le es inherente, distinta de lo demás. Todo, en el universo, fuera de esa cualidad, posee un nombre. Sólo ella no lo tiene, sólo ella es nueva. Nosotros nos esforzamos por darle nombre. Así comienza la poesía.

 
He estimado siempre que la música de la palabra no es un fenómeno acústico y no consiste en la eufonía de las vocales y las consonantes tomadas separadamente, sino en cierta relación entre el significado de la frase y su resonancia.


Yo no trataba de obtener ese ritmo martilleante de danza o de canción, bajo cuyo efecto, casi sin la participación de las palabras, las manos y los pies se ponen a agitarse mecánicamente. No intentaba expresar, reflejar, encarnar o representar cosa alguna... Bien al contrario, mi preocupación constante era que el poema contuviese en sí mismo algo, un pensamiento nuevo o un nuevo cuadro.


El hombre es mudo, es la imagen la que habla. Porque es evidente que sólo la imagen puede marchar al compás de la naturaleza.


La metáfora es la consecuencia natural del contraste entre la fugacidad del hombre, y la inmensidad de las tareas que le están asignadas y que exigirían un larguísimo período de tiempo. Por eso, el hombre se ve constreñido a mirar las cosas con vista de águila y a desplegarse en iluminaciones repentinas, comprensibles al vuelo. Tal es la esencia de la poesía. La metáfora es la taquigrafía de una gran personalidad, la escritura abreviada de su espíritu.


A mi juicio, los descubrimientos más notables se han producido cuando el tema que llenaba y desbordaba al artista no lo dejaba reflexionar y apresuradamente debía proferir su palabra nueva en una lengua antigua, sin haber podido dilucidar si esa lengua era nueva o vieja.


El lenguaje directo del sentimiento es alegórico, y nada puede sustituirlo.


El arte está lleno de cosas conocidas de todos, de verdades que corren por la calle.

                                                         Boris Pasternak 
                                     

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